lunes, 11 de enero de 2010

Entre sueños


Me despierta el calido aliento posado en mi nuca, una mano tranquila y amable que busca mi vientre, y enseguida un dulce olor a ti.

Mi cuerpo acurrucado, busca el hueco de tu cuerpo, nuestras manos se entrelazan y me aferro con fuerza a ti, suspiro y suspiras... puedo sentir tu pecho en mi espalda, tus muslos enredados ya con los mios y esa sensación de bienestar me invade de nuevo.

Te encanta acariciarme el cuello, y llenarlo de besos y pequeños mordiscos, que hacen que mi espalda se arquee, y un dulce escalofrio me recorra poniéndome los pelos de punta, y ya no puedo más... , me doy la vuelta y estás ahí, con los ojos todavía cerrados y la sonrisa dibujada en la cara. Te abrazo y me abrazas, como si fuese el último abrazo o tal vez el primero, ya nada más importa, es nuestro momento, mi boca te busca con urgencia y la tuya me acoge como la primera vez. Mi cara recorre tu cuerpo a la distancia que permite que tu olor se apodere de mí, me encata como hueles, siempre me ha gustado.

Ahora soy yo la que busca tu cuello para llenarlo de besos y dibujar con mi lengua los caminos que me llevan a tu oido para poder decirte:


_ Buenos días mi amor.


2 comentarios:

  1. vaya, realmente es precioso. Me he metido de lleno entre cada palabra y me he visto reflejada. Enhorabuena, indiscutiblemente transmites con una fuerza increíble...Tienes una nueva fan.

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